Cuando diste tus primeros pasos en el rock argentino, se vivía una etapa muy romántica, de mucha fraternidad entre los músicos. ¿Percibís ese período de igual manera?
María Rosa Yorio: Teníamos 19 años y éramos absolutamente idealistas. Uno salía a cantar y en ningún momento se planteaba que tenía que maquillarse o ponerse un vestido para ello. Ibas con el mismo blue jeans y las mismas zapatillas. La única preocupación era la de ensayar horas y horas. Cuando se armó PorSuiGieco (1974), éramos tan románticos que ni quisimos que aparezcan nuestros nombres y preferimos que la gente se entere de boca en boca. Era una época absolutamente poética, donde el arte no estaba unido al negocio. Spinetta se paraba en cualquier lugar y se ponía a leer poesía en voz alta, Charly se pasaba todo el día escribiendo o pintando, yo hacía teatro, danza y cantaba. Eso era aquel momento, y no había una idea tan marcada de que con eso podías ser rico o famoso.
En una entrevista con 10musica.com/
María Rosa Yorio: Teníamos 19 años y éramos absolutamente idealistas. Uno salía a cantar y en ningún momento se planteaba que tenía que maquillarse o ponerse un vestido para ello. Ibas con el mismo blue jeans y las mismas zapatillas. La única preocupación era la de ensayar horas y horas. Cuando se armó PorSuiGieco (1974), éramos tan románticos que ni quisimos que aparezcan nuestros nombres y preferimos que la gente se entere de boca en boca. Era una época absolutamente poética, donde el arte no estaba unido al negocio. Spinetta se paraba en cualquier lugar y se ponía a leer poesía en voz alta, Charly se pasaba todo el día escribiendo o pintando, yo hacía teatro, danza y cantaba. Eso era aquel momento, y no había una idea tan marcada de que con eso podías ser rico o famoso.
En una entrevista con 10musica.com/
Las increíbles aventuras del señor Tijeras (1974)
Sui Generis. Charly García
Sui Generis. Charly García
Escondido atrás de su escritorio gris
un ser bajo, pequeño, correcto y gentil,
atiende los teléfonos y nunca está,
mira a su secretaria imaginándola
desnuda y en su cama,
y vuelve a trabajar.
un ser bajo, pequeño, correcto y gentil,
atiende los teléfonos y nunca está,
mira a su secretaria imaginándola
desnuda y en su cama,
y vuelve a trabajar.
Entra en el microcine y toma ubicación
hace gestos y habla sin definición,
se va con la película hasta su hogar,
le da un beso a su esposa y se vuelve a encerrar
a oscuras y en su sala
de cuidar la moral.
hace gestos y habla sin definición,
se va con la película hasta su hogar,
le da un beso a su esposa y se vuelve a encerrar
a oscuras y en su sala
de cuidar la moral.
Entra ella y se va desvistiendo,
lentamente y casi sonriendo
alta, blanca, algo exuberante,
dice: "Hola" y camina hacia adelante.
lentamente y casi sonriendo
alta, blanca, algo exuberante,
dice: "Hola" y camina hacia adelante.
Mira al hombre pequeño que se raya
cuando ella sale de la pantalla.
Y el hombre la acuesta sobre la alfombra,
la toca y la besa, pero no la nombra.
cuando ella sale de la pantalla.
Y el hombre la acuesta sobre la alfombra,
la toca y la besa, pero no la nombra.
Se contiene, suda y después,
con sus tijeras plateadas, recorta su cuerpo,
le corta su pelo, deforma su cara,
y así rutilada la lleva cargada hasta la pantalla
justo a la mañana.
con sus tijeras plateadas, recorta su cuerpo,
le corta su pelo, deforma su cara,
y así rutilada la lleva cargada hasta la pantalla
justo a la mañana.
No conozco tu nombre ni se más quien sos,
vi tu nombre en el diario y nadie te vio,
la pantalla que sangra ya nos dice adiós.
Te veré en 20 años en televisión, cortada y aburrida,
a todo color
a todo color
a todo color.
vi tu nombre en el diario y nadie te vio,
la pantalla que sangra ya nos dice adiós.
Te veré en 20 años en televisión, cortada y aburrida,
a todo color
a todo color
a todo color.
Estrofa censurada
Yo detesto a la gente que tiene el poder
de decir lo que es bueno y lo que es malo también,
sólo el pueblo, mi amigo, es capaz de entender
los censores de ideas temblarían de horror
ante el hombre libre con su cuerpo al sol.
de decir lo que es bueno y lo que es malo también,
sólo el pueblo, mi amigo, es capaz de entender
los censores de ideas temblarían de horror
ante el hombre libre con su cuerpo al sol.
Instituciones (1974)
Sui Generis. Charly García
Sui Generis. Charly García
Yo miro por el día que vendrá
hermoso como un sol en la ciudad,
y si me escuchas bien
creo que entenderás,
porque yo espere en vano
que me dieras tu mano.
De mis huesos la humanidad
debes salvar.
hermoso como un sol en la ciudad,
y si me escuchas bien
creo que entenderás,
porque yo espere en vano
que me dieras tu mano.
De mis huesos la humanidad
debes salvar.
Los magos, los acróbatas, los clowns
mueven los hilos con habilidad.
Pero no es el terror a la soledad
lo que hacen los payasos,
uno rojo, otro blanco
y a los viejos romper la voz
para cantar?
mueven los hilos con habilidad.
Pero no es el terror a la soledad
lo que hacen los payasos,
uno rojo, otro blanco
y a los viejos romper la voz
para cantar?
"Oye hijo las cosas están de este modo,
la radio en mi cuarto me lo dice todo".
No preguntes más!
"Tenés sábados, hembras y televisores,
tenés días para dar aún sin los pantalones."
No preguntes más!
la radio en mi cuarto me lo dice todo".
No preguntes más!
"Tenés sábados, hembras y televisores,
tenés días para dar aún sin los pantalones."
No preguntes más!
Siempre el mismo terror
a la soledad
me hizo esperar en vano
que me dieras tu mano
cuando el sol me viene a buscar
a llevar mis sueños al justo lugar...
a la soledad
me hizo esperar en vano
que me dieras tu mano
cuando el sol me viene a buscar
a llevar mis sueños al justo lugar...
Estrofas censuradas
Los magos, los acróbatas, los clowns
mueven los hilos con habilidad
pero es que ya me harté de esta libertad
y no quiero más paredes que acaricien mi espalda.
"Oye hijo las cosas están de este modo,
dame el poder y deja que yo arregle todo".
No preguntes más! (...)
Pero es que ya me harté de esta libertad,
yo no quiero más padres
que acaricien mi espalda.
Soy un hombre que quiere andar
sin pedir permiso para ir a llorar.
mueven los hilos con habilidad
pero es que ya me harté de esta libertad
y no quiero más paredes que acaricien mi espalda.
"Oye hijo las cosas están de este modo,
dame el poder y deja que yo arregle todo".
No preguntes más! (...)
Pero es que ya me harté de esta libertad,
yo no quiero más padres
que acaricien mi espalda.
Soy un hombre que quiere andar
sin pedir permiso para ir a llorar.
En 1979
Los sobrevivientes
Serú Girán.
Serú Girán.
Estamos ciegos de ver
cansados de tanto andar
estamos hartos de huir
en la ciudad.
Nunca tendremos raíz
nunca tendremos hogar
y sin embargo, ya ves,
somos de acá.
Vibramos como las campanas
como iglesias que se acercan desde el sur
como vestidos negros que se quieren desvestir.
Yo siempre te he llevado
bajo mi bufanda azul
por las calles como Cristo a la cruz.
cansados de tanto andar
estamos hartos de huir
en la ciudad.
Nunca tendremos raíz
nunca tendremos hogar
y sin embargo, ya ves,
somos de acá.
Vibramos como las campanas
como iglesias que se acercan desde el sur
como vestidos negros que se quieren desvestir.
Yo siempre te he llevado
bajo mi bufanda azul
por las calles como Cristo a la cruz.
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